Para que esta experiencia sea del todo satisfactoria y no tengamos problemas o sustos, lo mejor es tener en cuenta unas consideraciones:
1-Todos los perros provienen del lobo gris, pero la especialización que tras miles de años hemos provocado en sus cruces hace que exista gran variedad de razas con características diferentes. Es importante que conozcas a tu perro para prever ciertos comportamientos ante entornos salvajes. Por ejemplo, si tu perro es de genética de caza (braco, bretón, pointer...), va a ser muy difícil que si ve un animal salvaje o de granja no se vaya detrás de él, por lo que tal vez haya momentos en los que lo tengas que atar. Si se va lo normal es que vuelva a los pocos minutos, eso si, si no se desorienta o tiene algún problema con la presa, ataque de un jabalí acorralado por ejemplo.
Los perros soportan mejor el frío estando en movimiento que el calor, por lo que deberíamos tomar medidas para ellos si son de pelo corto y la temperatura es muy extrema (menos de -5º C) . Si es una raza proveniente del frío como los Huskys o tienen una buena capa de pelo no deberemos tomar medida ninguna.
3- Adapta las rutas a la fisionomía de tu perro. No vas a llevar a un perro de 50 kilos a una ruta con trepadas , ni hacer andar a un Chihuahua 25 kms ( aunque lo podría hacer, no es recomendable ). También ten en cuenta el daño que pueden sufrir en las almohadillas por terrenos muy pedregosos y afilados, sobre todo perros que no estén acostumbrados y perros pesados.
4- A los perros les puede quemar el sol en zonas con poco pelo, como en los belfos, párpados, o calvas que pueda tener por heridas o por estrés. Tenerlo en cuenta si la exposición al sol es muy prolongada en Primavera o Verano.
5- Si vas a hacer excursiones por la nieve y hielo es conveniente que protejas las almohadillas del perro con vaselina, para que no sufra quemaduras.
6-Ten en cuenta si en la ruta pueden existir puntos en los que el perro no pueda avanzar por si sólo y tengas que cogerlo en brazos, por ejemplo ante una escalerilla o en caso de pendientes muy pronunciadas en descenso, ya que no tienen la habilidad de un humano o de un felino.
7- Ten cuidado con la procesionaria, principalmente a finales de Invierno y principios de Primavera. Es una oruga que vive generalmente en los pinos ( se ven los nidos en las copas, son como pelotas de telilla blanca ). Se mueven por el suelo en largas hileras y pueden provocar necrosis en la lengua si el perro la prueba.
8- El sentido de la orientación del perro y su olfato te pueden ayudar a retomar un camino o a buscar la salida de una zona boscosa cerrada, tenlo en cuenta por si te pierdes o no ves posibilidad de avanzar por la maleza. En ese caso suéltalo si lo llevas atado y síguelo.
Recojo a tu perro o perros en tu domicilio y me los llevo al monte, devolviéndotelos por la tarde cansados y felices, te lo agradeceran enormemente ya que también socializarán con otros perros.
En el siguiente blog os podéis descargar y descubrir rutas de senderismo aptas para perros:
Gracias, pueden parecer menores pero estos consejos (muy prácticos) cuando vamos al monte con nuestros perros nos pueden ayudar a evitar algun problemilla que otro.
ResponderEliminarEspecial atención a la procesionaria, nadie se imagina lo peligrosa que es para nuestros perros (y para nosotros), el tiempo de actuación es fundamental si nuestro perro a entrado en contacto con la oruga, lo mas rápido posible al veterinario de urgencia.
Gracias, de mucha ayuda el articulo ;)